Pilar Garaialde, miembro de la Fundación Egiari Zor, y Lander García, colaborador de la asociación 3M [3 de Marzo], bajo el lema "Memoria del pasado, relato del futuro, lucha de hoy", reflexionarán sobre la importancia de la memoria y de las memorias en los procesos de liberación de hoy y sobre la competencia del relato.

Los contertulios hablarán sobre memoria y relato, sobre el Franquismo y la transición, sobre el mito de la transición y la transición orquestal. El régimen del 78 de la "democracia", el régimen de excepción, el GAL, las torturas, la impunidad y la hegemonía de un relato y la importancia de la memoria en el proceso de liberación. Durante generaciones en los procesos de liberación, la actividad política puede ser de diferentes formas adaptadas a cada época. Pero la memoria para que la actividad política esté ligada a lo que se ha hecho anteriormente es el instrumento imprescindible.

El relato de lo ocurrido condiciona el presente. ¿Cuándo comenzó el conflicto? ¿Cómo contarlo, desde cuándo, cronológicamente pero en partes o en su totalidad? Por ejemplo, sobre esta periodización, hay un primer choque o nudo que podemos estudiar. Las consecuencias de la represión del Estado, la división en periodos de las memorias del conflicto político tiene sus riesgos:

En el debate del relato hay intentos de dividir la dictadura franquista en periodos. En los años 1936-1937, las organizaciones dirigidas por el PNV-PSOE han trasmitido muchas veces la idea de que era legítimo tomar las armas contra el fascismo.

Nosotros no dividiremos la dictadura como hace Gogora (quién diferencia la memoria histórica de la memoria histórica y la memoria reciente, con el año 1960 como hito). Esta realidad no se da a lo largo del mundo, el punto de vista internacional es muy importante para entender que la cuestión de la memoria en el País Vasco está en estado de excepción. Nadie divide en periodos las violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos de las dictaduras de Sudáfrica, Portugal, Chile, Argentina o Uruguay. El Gobierno Vasco lo está haciendo. Esta división divide también los derechos de las víctimas. Los policías te asesinaron, pero según el calendario de ese día no te meterás en ningún otro o en ningún sitio.

Sin alejarse mucho, en la propia Europa, las consecuencias del conflicto político armado en Irlanda se abordan de forma integral En el País Vasco todo eso es imposible, pero comparado con todos los ejemplos anteriores, aquí no hay ni del acuerdo de Viernes Santo ni de las políticas públicas rompedoras de memoria hacia esas dictaduras. Estamos en un sistema basado en la impunidad del franquismo. La ausencia de fractura democrática alimentó el conflicto político-armado y eso es lo que se está reflejando de forma permanente en el ámbito de la memoria o en la pugna por el relato.

La memoria tiene una estructura narrativa. El contenido, la forma de expresión y la forma de expresión lo ponen de manifiesto. La memoria colectiva es un proceso social de reconstrucción del pasado y/o significado vivido por un grupo o sociedad, que se concentra en ámbitos sociales como el tiempo y el espacio, y el lenguaje, pero también se sostiene por los significados, que también están presentes en la cultura. Y existe la necesidad de construir espacios para trabajar la memoria histórica de forma inclusiva.

Por último, la Fundación Egiari Zor afirma en sus declaraciones que el concepto de convivencia democrática, además de "superar las consecuencias de la lucha armada y garantizar todos los derechos de todas las personas", exige "abordar las causas de un conflicto político que sigue vigente" porque "una sociedad que quiere desarrollarse sobre unos parámetros de convivencia democrática debe ejercer su derecho a decidir libre y democráticamente su presente y futuro".